Si hay una firma de autos que conocemos bien, sin duda es KIA. La marca sur coreana nos ha dejado probar la mayoría de sus coches (nos falta Soul) y podríamos decir que tiene casi de todo. Desde sedanes, deportivos, suv mediana y su suv más grande, Sedona, el vehículo familiar de KIA.
Kia Sedona es sin duda un vehículo familiar gracias a sus dimensiones tan grandes y funciones específicas para tantos pasajeros.
Tuvimos la oportunidad de manejarlo por una semana y estas son nuestras primeras impresiones de la SUV de la firma sur coreana.
A primera vista te das cuenta de su tamaño, tanto al largo como al ancho, aunque a pesar de ser una suv grande no pierde el estilo divertido en cuanto a diseño interior y exterior.
El exterior es algo curvo, o sea del techo cae hacia el frente las lineas marcadas de la carrocería, así como por la parte trasera.
Una vez dentro del interior, notas que en cuanto te subes el asiento de conductor se ajusta a la última posición establecida, ahorrándote un par segundos, misma posición que regresa a su estado original cuando apagas el vehículo.
La puertas son muy ligeras al momento de abrirlas, tanto que me tuve que asegurar dos veces si no las dejaba abiertas, algo un poco raro.
Kia Sedona: Prueba de manejo
Es un vehículo grande, pues es el más grande de la firma considerándolo un vehículo familiar y se siente al momento de manejar, sobretodo al pasar por espacios angostos como estacionamientos.
Me hubiera gustado aprovechar al máximo todas las capacidades de esta camioneta, o sea ocupar cada una de sus plazas.
Lo interesante de Sedona es que todas las filas tienen algo qué ofrecer. Al frente está todo el panel de instrumentos con espacios grandes, así como asientos ajustables.
En la segunda fila están dos asientos de capitán, los cuales gozan de una pantalla para cada uno situadas en el respaldo de los asientos de conductor y copiloto.
Las dos pantallas individuales pueden usarse como entretenimiento en viajes largos, los cuales incluyen un par de audífonos ubicados en la parte trasera de Sedona.
La abertura de las puertas para los pasajeros de la segunda y tercera fila es solo con tocar el botón de las manijas y éstas se abren eléctricamente.
Si bien no tiene alarma de seguro, te das cuenta que cierras el vehículo porque los espejos laterales se abaten, mismos que se despliegan con solo acercarte al vehículo con el control sin tener que presionar algún botón.
Características de diseño
En la puerta del conductor están los botones que al principio se me hicieron algo confusos, pues en vez de manipular la posición de tus espejos laterales hay un botón específicamente que sirve para abatir por completo los espejos.
El volante tiene unos detalles tipo madera que lo hacen suave al tacto y muy maniobrable porque se ajusta al tamaño de las manos, ofreciendo una mejor experiencia de manejo a las personas.
Cuenta con un quemacocos que puede abrirse desde la segunda fila de asientos, no es tan grande pero da algo de luz al interior.
Para seguridad, Kia Sedona ofrece un sensor de objetos cercanos, cámara de reversa, posee seis bolsas de aire y su carrocería en acero es de alta resistencia, según asegura la marca.
Algunas de las asistencias son: asistente de arranque de pendientes, alerta de tráfico cruzado, control electrónico de estabilidad, entre otras.
Una de las cosas que me extrañaron es que al sincronizar el smartphone por bluetooth, el sonido casi no se escuche bien manipulándolo desde el tablero, tiene que ser directamente desde el móvil.
Cuenta con cargador inalámbrico, cosa que se agradece en estos tiempos donde ya no solo existe la entrada USB tradicional.
Motorización, precios y versiones
Acelera bien, aunque hay que tener en cuenta que al ser un vehículo grande deberá ocuparse por completo (la mayoría de las veces) restándole un poco de velocidad.
Kia Sedona se alimenta por un motor V6 3.3L MPI con transmisión automática de 6 velocidades.
El precio parte desde los $592,900 MXN y son cuatro versiones: LX, EX, EX PACK y SXL, nosotros manejamos la tope de gama.
