Ya hemos hablado de la importancia que tiene par alas marcas automotrices el adaptarse a los cambios de la civilización, sociedad y tecnología. Peugeot es una de esas marcas que lo está haciendo bien con su última innovación: el Peugeot 9×8, su nuevo hypercar que presentó a principios del verano y pronto competirá en el campeonato mundial de resistencia y en las 24 hrs de le Mans.
Durante más de 210 años, Peugeot se ha ido adaptando a los tiempos y se ha anticipado a los cambios de comportamiento encontrando el camino para nuevas soluciones de movilidad.
Hace exactamente 30 años, en 1991 el Peugeot 905 se presentó como uno de los vehículos pioneros de la marca con su ADN.
Fue ahí donde la gran aventura deportiva comenzó para Peugeot dentro de las grandes pistas de competición.
Antecedentes: Campeonato Mundial de Resistencia con Peugeot 905
El vehículo era innovador, tenía una pureza visual absoluta y la parte frontal era característica de los modelos de esa época.
Estaba propulsado por 650 hp, 3.5L y un motor V10 de cuarenta válvulas, muy cercano a los estándares de la F1.
Fue tanto su éxito entre 1990 y 1993, que llegó a competir con vehículos como Porsche, Jaguar, Toyota y Mazda.
En 1993, ganó el 1º, 2º y 3º puesto del podio en las 24 horas de Le Mans en sus tres Peugeot 905.
Peugeot 9×8: En la actualidad
Después de aquél triunfo en el automovilismo, Peugeot desea regresar con fuerza a las carreras de resistencia con el Peugeot 9×8.
Con este nuevo vehículo combina deportividad, know-how tecnológico, eficiencia y excelencia.
El diseño se distingue por las luces delanteras y traseras, con las tres características garras de león en ellas.
En los costados vemos espejos integrados al chasis, que parece no tener resistencia al aire.
Por atrás vemos un gran difusor enmarcado por elementos esculpidos que albergan los faros y una inscripción que subraya la característica innovadora más llamativa del 9×8: there is no rear wing! “We did not want a rear wing” (¡no hay alerón trasero! “No queríamos un alerón trasero”).
Pasando al motor, se hicieron híbridos. Combinaron un biturbo V6 de gasolina de 500 kW (680 hp) que impulsa las llantas traseras y un motor/generador eléctrico de 200 kW (270 hp) que impulsa las llantas delanteras.
Y ¿de dónde viene el nombre 9×8?
El 9 es por el Peugeot 905 que compitió en los 90s, así como el 908, la X se refiere a las tecnologías híbridas y a la tracción total utilizada en el nuevo Peugeot Hypercar. Finalmente el 8 es una seña de todos los vehículos nuevos de Peugeot: 308, 2008, 308, 3008, 5008, 508.
Con este Peugeot 9×8, la marca desea un regreso excelente y perdurable.
